sábado, 11 de mayo de 2013

El impacto familiar y social del alumno con N.E.E.

El pasado viernes en clase de "Atención al alumnado con necesidades de apoyo educativo" dimos el impacto social y familiar de los niños con necesidades educativas especiales.


Para introducir el tema, dimos una definición de familia. Esta no es solo un hecho biológico o sociológico, sino donde se aprenden cualidades humanas, morales, de amor filial, las costumbres, etc. Es necesario que la familia esté preparada para la llegada de un nuevo miembro, con vistas a contribuir al desarrollo y felicidad del pequeño. 

Todas las familias esperan la llegada de un niño normal, por lo que ante la presencia de un miembro con cualquier discapacidad  la familia, si no ha asimilado el hecho, se vuelve vulnerable y las expectativas familiares cambian, produciéndose toda una serie de sentimientos complejos, contradictorios y difíciles de explicar. El autoculpamiento o culpar a otro es uno de los sentimientos que más se crean entre las familias ante esta situación, y también es uno de los más dañinos. Es un proceso difícil y duradero par las familias,  renunciar a las expectativas que tenían y aceptar la nueva situación. 

Las cuatro fases por las que pasan estas familias ante el nacimiento del hijo/a con discapacidad son: 

1. Fuerte impacto emocional ante la noticia; sensaciones de tristeza y culpabilidad. El impacto varia en función de la severidad, la naturaleza de la discapacidad y el sexo del recién nacido.

2.  Negación o incredulidad ante el diagnostico. Se niegan a aceptar la evidencia de la discapacidad. Buscan otros profesionales y otros diagnósticos.

3. Preocupación por el hijo/a y separación de los sentimientos de culpa y desesperanza; sobre protección. 

4. Reorganización familiar. Fase de adaptación. Incorporación del hijo/a en el marco familiar.

Por último, para los hermanos también puede suponer un gran conflicto: 

- El cuidado extra que éste necesita es probable que haga a los hermanos sentirse menos importantes para sus padres. Puede ser que estos presenten a la larga problemas afectivos.
- La tensión que experimentan los padres, puede repercutir en las interacciones con ostros hijos, haciendo éstas más conflictivas. 
- Asumen con frecuencia el rol y las responsabilidad de cuidar del hermano deficiente. 







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